Algunos perros son excelentes timbres, pero un perro que ladra a las visitas no siempre es bien recibido, ¿verdad? Tanto si su perro ladra porque se siente territorial como si lo hace porque es social que se vuelve loco de emoción, probablemente quiera saber cómo hacer que su perro deje de ladrar a las visitas.
En este artículo, analizaremos por qué los perros ladran a las visitas, las medidas que puede tomar para evitar que su perro ladre a las visitas y nuestros consejos principales para evitar que su perro ladre a las visitas.
Ladrar a las visitas es un problema de educación típico que puede solucionarse fácilmente.
¿Por qué ladran los perros a las visitas?
Los perros ladran a los visitantes por muchas razones diferentes, pueden sentir miedo o ansiedad ante alguien nuevo en su territorio. También pueden estar excitados ante la perspectiva de que una nueva persona les haga mimos. Sea cual sea el motivo de sus ladridos, suelen provocar una reacción en nosotros.
Cómo evitar que el perro ladre a las visitas
Para que su perro deje de ladrar a las visitas, primero averigüe cuál es la causa subyacente detrás de los ladridos y, a continuación, cree un plan de educación para que su perro empiece a tener una actitud diferente ante los invitados y pueda aprender cuál es un comportamiento más adecuado para recibir a las visitas.
Averigüe por qué su perro ladra a las visitas
Fíjese en el lenguaje corporal de su perro para averiguar si está actuando de forma territorial y mostrando un comportamiento de “manténgase alejado o de lo contrario”, si tiene miedo o está asustado y quiere que la persona que le asusta se vaya, o si se siente sobreestimulado cuando llegan visitas y no sabe qué hacer, ¡salvo ladrar!
Enseñe a su perro a ir a su cama
Una de las formas más sencillas de conseguir que un perro deje de ladrar a las visitas es enseñarle a ir a su cama o colchoneta cuando llega una visita. La mejor manera de hacerlo es enseñarles que el timbre o la llamada a la puerta se convierten en una señal para que vayan a su colchoneta.
Utiliza recompensas para enseñarles esto, y usa una señal como “ok” o “libre” para liberarlos de su cama.
Prepárese para trabajar en la educación
Lleva tiempo educar o adiestrar a un perro para que se quede tranquilamente en su cama cuando llegan visitas. Durante el adiestramiento, deberá crear situaciones ficticias, por lo que es posible que tenga una grabación del timbre de la puerta que pueda reproducir en su teléfono y que indique a su perro que debe ir a su colchoneta, pero es probable que, para empezar, no permanezca allí mucho tiempo, así que recuerde que debe ser paciente.
Dé a su perro otra cosa que hacer
Utilizar juguetes que contengan comida, como un Kong de peluche, un juguete para masticar o un rompecabezas, puede ayudar a su perro a permanecer en su cama durante más tiempo y a mantener la calma cuando lleguen visitas.
Premie a su perro cuando esté tranquilo y callado
Los perros hacen lo que les resulta gratificante, y si eso les resulta gratificante porque disfrutan ladrando, o porque ladrando consiguen atención o afecto, debemos recompensar otros comportamientos más apropiados, como ¡no ladrar!
Pídale a su perro otros comportamientos que no sean ladrar
Si su perro ladra porque quiere interactuar con sus invitados, pídale algunas señales básicas de obediencia para enseñarle que hay otras cosas que puede hacer para conseguir esa ansiada atención.
¿Qué tal si su perro se sienta como una forma de decir “por favor puedes acariciarme”, eso sería mucho mejor para nuestros oídos que ellos ladrando como locos, verdad?
Consejos para que tu perro no ladre a las visitas
Hay muchas otras cosas que puede hacer para asegurarse de que su perro no ladre a las visitas.
Controle el entorno: coloque a su perro en una zona a prueba de cachorros, una jaula, un corral u otra habitación con algo agradable que hacer para mantenerlo ocupado.
Coloque un bote de golosinas junto a la puerta de entrada y pida a sus visitantes que cojan un puñado de golosinas al entrar y se las lancen a su perro antes de que puedan ladrar.
Pida a sus invitados que no miren directamente a su perro, sino que le lancen algunas golosinas cuando se sienten.
Asegúrese de que su perro ha dado un buen paseo para que no esté lleno de comida cuando lleguen los invitados.
Si tienes un cachorro, socialízalo con la gente desde pequeño, para que no le asusten los extraños. Esto es esencial para evitar que ladre a las visitas.
Esperamos haberle dado algunas ideas para evitar que su perro ladre a las visitas. Gestionar el entorno, averiguar por qué ladra su perro y luego enseñarle lo que quiere que haga en lugar de ladrar, con refuerzo positivo, será el camino a seguir.
Sobre el autor
Soy adiestrador canino profesional certificado por la ANACP Nº 8621. Trabajo junto a mi equipo de trabajo perruno en mejorar vuestra convivencia con vuestros compañeros caninos.